Artísticamente, es un reto. Cuando comenzamos, en el 92, no pensábamos salir de nuestra ciudad chica. Cantábamos para la familia y amigos, sin compromiso profesional. Pero vimos que esto era lo que más amábamos y después de años fuimos a cantar a al capital de nuestro estado.
Nuestro tiempo en Brasil es muy chico. Hacemos unos 200 conciertos al año. Fue un reto más grande por eso. Hicimos tres meses de clases en los viajes, en el avión, en el hotel, siempre con maestros hablándonos. Entonces aprendimos un poco. Y cuando llegamos al estudio a grabar, estaban allí Aureo Baquiero, un productor, y Leonel García, de Sin Bandera.
Viene de esa noche, cantando ante ese joven y su cerveza. No teníamos a nadie más y cantamos toda la noche. Cuando se fue, pensamos que si él no estuviera con nosotros, no tendríamos a quién cantarle.
Creen mucho en el amor...
Cuando estamos en un concierto, usamos nuestra condición profesional y nuestra fama para darle a la gente ejemplos de amor. Decimos que Dios y amor no son nombres, son también actitudes. La vida con actitud positiva basada en el amor es más feliz. Si haces algo pensando en alcanzar la fama y mucha plata, lo puedes alcanzar. También tendrás el conocimiento, pero no vas a ser feliz si no haces lo que amas.
¿Quién compone las canciones del dúo?
Yo compongo más que Leo. Hice mi primera canción en 1993. Poco a poco fui evolucionando en mis capacidades. Pasar mis emociones a la música es necesario para mí, así que hay emociones verdaderas. Puedo hacer una canción mirando una película, pero basada en una emoción verdadera. Así como en la canción Amigo apasionado, que está en este trabajo.
¿Cuál es la historia?
Yo era un chico y me enamoré de una amiga. Ella se asustó y dijo que no podríamos porque éramos solamente amigos. Años después, acordándome de esto, hice la canción. No solo para contar la historia de un amigo enamorado de una amiga, sino con la idea de ser un ejemplo para los hombres que tienen sus mujeres pero no saben que para amarlas verdaderamente es necesario que sean sus mejores amigos.
¿Y cuál es la parte de Leo dentro del dueto, además de cantar?
Yo toco las guitarras, mi hermano produce y hace los arreglos conmigo. Hay muchas canciones que hicimos juntos, pero en este álbum en español hay solo una de esas. Grabamos nuestro primer disco en el 2001. Nos invitó una pequeña disquera de Sao Paulo. El disco quedó con nuestra cara, pero los arreglos y la producción no fueron nuestros. En el 2003 volvimos a ser independientes y grabamos produciendo nosotros mismos. Fue en el 2003 y se hizo en vivo. Lo reconocieron de forma natural, sin promoción en el país. Eso llamó la atención. Después, Sony respetó que tuviéramos composiciones, arreglos y producción musical propias.
¿Y el público latinoamericano cómo ha reaccionado ante su música?
No hay mucha diferencia con el público brasileño. También nuestra actitud es fácil. Sony sintió que nuestra música era universal. Por eso nos invitó a grabar en español. No pensamos que somos brasileños cantando para gente de otros países, sino que somos terrestres, gente del mismo planeta cantando para otra gente: humanos cantando para humanos. No tenemos demasiado sentimiento de patriotismo; la igualdad y el amor son condiciones para cualquier país, cultura, religión... O equipo de fútbol.
¿Qué canciones han marcado la historia de Víctor & Leo?
No hay una que se destaque o llame más la atención. En Brasil, nuestro trabajo no se conoció por una sola canción, sino por muchas en regiones diferentes. Hacemos discos que buscan gustos diferentes. Hoy tenemos una canción de trabajo, para una mejor organización, pero no podemos imponer algo. Trabajamos con la canción 'Nada es normal', en Miami y Puerto Rico como primer sencillo, pero no es la preferida, sino la que escogimos para comenzar. Cada canción llega de forma diferente y hay un tiempo para todas y cada una.
Fonte: Vive.in Musica
Pesquisa: Vânia Waleska
Nenhum comentário:
Postar um comentário